Los acontecimientos sufridos en las últimas fechas dan muestra clara de una necesidad de cambio urgente, porque ya son dos (con posibilidad a tres) personas que han sufrido daños graves en su anatomía producto de patadas con malas intenciones, y ahora un golpe certero en el ojo del DT de Belgrano que puede tener un desprendimiento de retina.
Aparte de la gravedad de los perjudicados, el hecho de que la violencia ya este instalada de diferentes maneras en el Fútbol Regional de Río Cuarto provoca ese miedo de la gente a concurrir a las canchas. Algo que sería muy grave para los clubes debido a que luego de la pandemia que azotó tanto a las instituciones, la necesidad de que la gente se haga presente a alentar a su equipo es un respiro económico para ellos.
También la forma en la que se ocasionaron las lesiones tanto de López como Álvarez dan muestra de cómo están los ánimos de los principales protagonistas. Y que ahora un jugador de Avellaneda haya golpeado a Depetris, DT de Belgrano, evidencia aún más la situación. Por eso es necesario una acción para evitar problemas mayores, ya que de esta manera se exponen a los equipos y jugadores a un riesgo cada vez mas grande, que podría en algunos casos acabar con la carrera de alguno de ellos.
El golpe hacia Depetris no es la excepción, ya que el DT corre el riesgo de tener un severo daño en su ojo ya que como se dijo anteriormente, hay un posible desprendimiento de retina.
