En la vuelta al público en el «Candini», el «Celeste» empató 0-0.
Fue el reencuentro esperado por muchos, la necesidad de volver a jugar un partido con el apoyo del público es un condimento que solo la hinchada del futbol argentino sabe darle al ambiente futbolero. No solo porque ayuda al espectáculo, sino también por la situación que vivieron los clubes en estos momentos de pandemia.
Y mas allá de las sensaciones encontradas, Estudiantes no pudo romper el 0 frente a San Martin de Tucumán y hasta estuvo a punto de perderlo, pero Olivera (que fue la figura de la tarde) logro frenar la embestida tucumana y pudo resistir el empate atajándole un penal a Estigarribia.
Las intenciones estuvieron pero las cosas no cambiaron y el partido terminó en un 0-0 que no ayudó a ninguno de los dos. Ya que San Martin debía ganar para seguir prendido en la parte alta de la tabla, mas allá de mantener su cupo dentro del reducido, los números todavía no lo terminan de confirmar como un firme candidato y sumar de a tres ayudaría a plantarse dentro de esas posiciones.
Y por lado de Estudiantes mas que nada por la necesidad de mejorar su juego, ya que viene de cuatro empates seguidos y necesita una victoria para poder despegar y comenzar a escalar.
