La localidad cordobesa recibía un partido muy importante. El líder y el escolta se enfrentaban teniendo solamente un punto de diferencia y, por lo tanto, la presión y el fervor del local comenzaba a sentirse en el estadio.
El «Aurinegro» llegaba golpeado tras ser derrotado en Río Cuarto por Estudiantes y necesitaba levantarse rápido para llegar al partido contra los «Mercedarios» sin fisuras en lo psicológico y técnico. Y justamente desde la misma ciudad que los «Celestes» que vencieron a Acción Juvenil llegaba Centro Cultural Alberdi, un equipo que llegaba con un triunfo frente a Juventud Unida que lo había hecho volver al liderato.
Con Leonardo Lupano como el árbitro designado, y con Trullet y Oyola en el banco de suplentes, se daba inicio al partido.
El desarrollo del mismo tuvo a los dos equipos con la clara intención de hacerse dueños de la mitad del campo de juego y desde esa posición poder escalar hasta llegar a los delanteros. Si bien ambos tuvieron oportunidades, el primer tiempo no tuvo tanto peligro en las áreas, pero tuvo al local encontrándose mejor en su cancha.
Fue en el segundo tiempo que la necesidad del gol comenzó a impacientar a los equipos y desde allí comenzaron a llegar las jugadas peligrosas en ambos arcos. Un cabezazo al palo de Alberdi, buenas tapadas de Bustamante y Cometto y algunos malos tiros fueron un resumen de lo acontecido hasta los 33 minutos. Ya que en ese momento, una falta cerca de la medialuna «mercedaria» fue suficiente para que el habilidoso y goleador de Acción Juvenil, Nicolás Del Sole, pudiera cambiar esa falta por un golazo. Fue así que su gran tiro venció al arquero de Alberdi y provocó la explosión del banco y también de la gente.
El encuentro también estuvo marcado por un momento de incidentes entre jugadores de ambos equipos, lo que provoco la expulsión de Flores para Alberdi y Caler desde el lado de Acción Juvenil.
Tras los disturbios, Lupano adicionó ocho minutos y fue así que Alberdi se adueñó de la pelota y tiro a su equipo sobre el área rival para poder encontrar el gol del empate, pero la resistencia del «Aurinegro» fue más y pudo soportar la presión y, por lo tanto, festejar el triunfo.
