
El 24 de septiembre pero de 2010 nacía un nuevo club en Río Cuarto: Juventud Unida. El «Tricolor» celebra su aniversario con la mirada puesta en la historia, el presente y el futuro. Quien mejor lo resume es su presidente, Marcelo Blenda, que acompaña al club desde que todo empezó.
“Para mí, el club es parte de mi vida, estoy desde que se fundó. Hemos pasado por momentos de felicidad, como también momentos de tristeza”. Entre los recuerdos más importantes menciona el primer ascenso, los títulos conseguidos en 2014 y la histórica participación en los torneos Federales B y C, que coronaron en 2018 con un campeonato inolvidable.
El crecimiento no fue solo deportivo, sino también institucional. Con dificultades desde los inicios, luchándola, Juventud supo hacerse fuerte en infraestructura: “Una de las cosas más importantes fue hacer crecer el club con infraestructura, teniendo dificultades con la tierra de la cancha. Logramos iluminar el estadio, una de las obras más importantes de nuestra institución”.

Pero no todo fueron alegrías. Por ejemplo, la pandemia marcó un antes y un después, fue un duro golpe en lo económico. Sin embargo, esa crisis se transformó en una nueva oportunidad para reinventarse: “La pandemia produjo un gran cambio para el club. Supimos reinventarnos y apostamos fuerte a las inferiores. Cinco años después podemos decir que ese cambio dio frutos”.

El descenso del 2023 también dejó una herida difícil, quizás la más dolorosa de estos quince años. “Ese fue el momento más triste para todos”, admitió Blenda. Hoy, sin embargo, el presente tiene un valor especial porque la Primera está integrada en su mayoría por chicos formados en inferiores, un equipo competitivo y unido que tiene como gran objetivo regresar a la máxima categoría de la Liga Regional.
Haciendo un balance de este recorrido, el presidente no se olvida de quienes hacen posible el día a día: “Quiero destacar el gran trabajo de esta comisión, todo lo hacemos con pasión y esfuerzo. Nuestro club es una gran familia y agradezco a los hinchas por acompañarnos en las buenas y en las malas”.
Para cerrar con una frase que refleja el orgullo tricolor, Marcelo expresó: “Para nosotros es muy lindo escuchar cuando vamos a otros clubes que digan: ‘Hoy nos toca jugar con Juventud Unida, no vamos a tener problema’. Eso nos llena el corazón”.
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