Toda la expectativa presentada en el proyecto de Leonel Scaloni y con Messi como el cabeza de un grupo con hambre de gloria era algo esperable en la previa al comienzo de la participación de los mismos en el mundial de Qatar. Pero el resultado fue esquivo y los «Saudís» se quedaron con el partido.
Al comienzo del cotejo, Messi de penal (Un agarrón no tan evidente a Paredes fue suficiente para que el VAR le dijera al árbitro que lo cobrara) ponía en ventaja a Argentina y en el primer tiempo el videoarbitraje también le anularía otros 3 producto de posiciones adelantadas, en un buen planteo de Arabia Saudita en defensa.
El segundo tiempo comenzó a plantearse de otra manera el partido y los de Asia Occidental comenzaban a lastimar la defensa argentina, y en un fallo de movimientos de «Cuti» Romero, ponían el empate en los pies de Salem Al Dawsari.
Fueron cinco minutos de martirio en el que el golpe mareó mucho a los jugadores argentinos que no podían evitar el embiste de Arabia Saudita, y en una jugada individual, Saleh Al-Shehri convertiría un golazo que daba vuelta el resultado en los primeros minutos del segundo tiempo.
Ya luego lo que sucedio despues estuvo invadido de nerviosismo, ansiedad y falta de juego dinámico. Argentina comenzó a buscar en el pelotazo y el desborde por la espalda posibilidades que la defensa asiática aguantaba y que su arquero, Mohammed Al-Owais se transformo en la figura del partido.
Quedan dos partidos mas para modificar este traspié en el que Argentina necesita ganar para poder llegar con posibilidades tras la derrota.
Foto: Dylan Martinez
