«Disciplina, intensidad y pasión por el juego». No lo piensa dos veces. Esa es la frase que el cuerpo técnico de Deportivo Municipal elige para resumir lo que intenta construir. Lo que quiere dejar en la cancha. Lo que intenta contagiar dentro del grupo
El clásico del fin de semana no fue uno más. Además de la importancia futbolística, hubo un motivo extra para celebrarlo: Misael Lichieri cumplió 100 partidos al frente del equipo, en una historia que se construyó en dos ciclos, pero que mantiene la misma esencia.
«En base a eso es nuestra planificación. Buena conducta, buenos hábitos, trabajos de intervalos de alta intensidad y nos preocupamos por que haya algo de estética en la idea de juego«, declaró el DT.
El «Celeste» transita hoy un buen presente. El equipo recuperó su identidad, respaldada claramente por su trabajo, por el grupo y por los resultados. Los 100 partidos no son un número más: son la confirmación de un camino recorrido, de una confianza mutua entre cuerpo técnico, jugadores y club.
Foto: Flor Zufiaurre.
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